Una historia romántica bastante pedorra. Está muy mal escrita y se nota que quien lo hizo jamás leyó una obra de amor en su vida.
Fijate: ya se confiesan su amor antes de que el niño se lo diga a la niña. Ella ya sabe que él lo ama, pero no se sobresalta. ¿Entonces?
Espero que las próximas historias de este índole sean mejores.
La idiotez virtual en su máxima expresión
sábado, 15 de noviembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario